Prozac para perros. Si bien los veterinarios reconocen que desde hace años apelan al Prozac para tratar problemas de conducta de perros y gatos, la aprobación en los Estados Unidos de un medicamento exclusivo para canes en base al mismo principio que el famoso antidepresivo reavivó el debate sobre la necesidad o no de modificar químicamente la conducta animal. Cuando el 26 de abril el ente regulador de medicamentos de los Estados Unidos (FDA) aprobó la venta de Reconcile, reavivó una polémica, que se renueva cada tanto, sobre qué hacer ante los problemas de conductas de las mascotas. Ocurre que los animales atados al destino del hombre están sometidos a entornos que nunca habían conocido (como permanecer encerrados en pequeños departamentos mientras se prolonga la jornada laboral de los dueños). Por eso, con este nuevo producto, el laboratorio Eli Lilly apostó a replicar el éxito que tuvo en humanos con el Prozac –también conocido como la droga de la felicidad–, con un diseño exclusivo para perros, que incluye no sólo una dosis adecuada sino, admás, un sabroso gusto a bife. Así, se “blanqueó” una situación que se da desde hace años en los consultorios veterinarios: el uso del antidepresivo más famoso para calmar a los animales inquietos. |