Perro cariñoso busca pareja. Francisco, dueño de “Donnatella, una hembra bulldog francés ha puesto un anuncio en la «agencia matrimonial» de una tienda madrileña de animales para que su «supercariñosa» mascota tenga descendencia. Si Donnatella tiene suerte y conoce al perro de su vida, esta empresa les ofrecerá formalizar su «relación», además, mediante una boda. Ocho parejas caninas ya se han «casado» en Madrid por este rito. A estas «bodas» acuden vestidos de gala tanto los contrayentes como los invitados -perrunos y humanos-. En la ceremonia no faltan los simbólicos anillos, aunque sustituidos por chapas conmemorativas para los animales. Las arras, a su vez, son reemplazadas por pequeños huesos, y tampoco faltan el «altar», el banquete o la alfombra roja. Unos clásicos matrimoniales, aunque sea para unir a dos perros. La empresa cobra por organizar este rito unos 800 euros, prosigue su responsable, que sostiene que la iniciativa está teniendo cada vez más éxito. La agencia, en todo caso, fija este simbólico enlace como opcional: lo importante es que los perros puedan conocerse y tener descendencia con otros de su misma raza. En caso de descendencia, el propietario del macho se quedaría con un cachorro de la camada y el resto serían para los propietarios de la hembra. |